La psicología humana y la crisis

1.- Introducción
A la crisis estamos buscándole un culpable y creemos haberlo encontrado en los bancos, en sus dirigentes e incluso en los corruptos políticos. Pero la realidad es que todos somos igual de culpables, todos obedecemos en mayor o menor medida a la misma psicología humana que está detrás de todo junto con una mala formación de convivencia en sociedad.

2.- Un poco de historia
El ser humano siempre ha querido vivir mejor. Se fijaba en sus vecinos, en los nobles, en los reyes y todos querían tener ese nivel de vida. Y hoy en día no es diferente. El individualismo que nos venden la sociedad desde todos los medios nos hacen querer tener más que el vecino.

3.- La realidad
Esa competitividad insana sólo nos deja mirar hacia delante, hacia lo que queremos conseguir. Somos como el burro siguiendo la zanahoria y no nos fijamos ni donde pisamos ni hacia donde nos dirigimos. Y todos igual, cada uno desde su posición social en la que esté, pero todos iguales.

No podemos echarle la culpa a los bancos porque todos hemos querido tener una mejor casa, un mejor coche, que las calles estén mejor arregladas, que haya mejores autovías. Todos, individuos y gobiernos ha pendido créditos para poder tener todo eso hoy y no mañana. Los bancos se han limitado a darnos lo que pedíamos. Si no nos lo hubiera dado un banco nos lo hubiera dado otro. Y nadie iba a votar a un gobierno cuyo programa electoral se basara en un crecimiento menor que el que se veía que se podía conseguir. Pero siempre sin pensar en las consecuencias.

Que sí, que ha habido mucha corrupción y algunos han hecho muy mal las cosas buscando el beneficio personal a costa de otros. Tal vez hasta haya que agradecerlo porque caer íbamos a caer igual y cuanto más tarde mucho más alto hubiéramos llegado y peor hubiera sido la caída. Además, tampoco creo que podamos decir que el ciudadano de a pie no haya sido corrupto o se haya dejado sobornar. Se ha dejado sobornar con créditos fáciles que le han permitido adquirir productos que difícilmente iba a poder pagar. Sí, mientras tuviera trabajo y había trabajo mientras la sociedad hubiera seguido funcionando como hasta hace poco. Pero todo tiene un límite y se lleva avisando desde hace ya casi cuarenta años. Véase "Los límites del crecimiento", de 1972. Muy criticado por su poca precisión pero debería haber sido suficiente los razonamientos de los límites para haberle prestado atención. Pero nadie quería dejar su cómodo estilo de vida y adoptar uno donde tuviera menos de todo.

Nos hemos comportado como niños malcriados a los que se le ha dado todo lo que se les antojaba.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

A ver si entre todos mejoramos las ideas y las llevamos a la práctica