Economía, Petróleo y Cambio Climático: El declive final de la sociedad del siglo XX

1.- Introducción
  • La economía cambiará por las buenas o por las malas. El crecimiento continuo en el que se basa la economía actual se detendrá en algún momento. De hecho, en Europa y Estados Unidos ya lo ha sucedido aunque se resisten a aceptarlo y van a intentar un último asalto por recuperarlo que sólo servirá para que el declive sea más pronunciado.
  • Nos tendremos que adaptar a un mundo con menos petróleo por las buenas o por las malas. La economía actual depende absolutamente del petróleo y el petróleo, aunque aún queda mucho, no será capaz de cubrir el incremento de la demanda que se prevé se producirá en breve.
  • Y nos tendremos que intentar adaptar a un nuevo clima o extinguiros porque, aunque no emitamos más CO2, ya hay demasiado y se tardarán varios siglos o milenios en volver de forma natural a los niveles que había antes de la Revolución Industrial. Además, menos petróleo a corto plazo no significa necesariamente algo bueno ya que para ciertos procesos industriales se puede usar carbón que es muchísimo peor.
El desenlace dependerá de las decisiones que tome la humanidad que hasta ahora no creo que alguien pueda decir que han sido acertadas.


2.- El inicio del declive
El inicio no será fácil de reconocer, más aún si tenemos en cuenta que no lo vamos a querer ver. De hecho, puesto que es una mezcla de economía, recursos naturales y clima, se puede decir que ya ha empezado. Los libros de historia del futuro, si es que hay tal futuro, podrán decir que empezó en 2008 con la crisis financiera de las grandes economías. Habrá quien diga que empezó en 1991 cuando los tipos de interés se volvieron tan pequeños que facilitaron la creación de la burbuja financiera que estalló en 2008. Otros pondrán la fecha en 1979 que fue cuando se estancó el crecimiento de la energía per cápita a nivel global. Incluso se podrá ir hasta un año en el que se superase cierto valor de CO2 en la atmósfera. Pero siempre quedará la pregunta de en qué momento se traspasó la línea de no retorno.
La sociedad actual deposita sus esperanzas en la ciencia y espera un milagro tecnológico que, con toda la información sobre la mesa, se sabe que no se puede dar. Y sólo será cociente de esta realidad cuando todas las economías dejen de crecer.


3.- El primer día
Todo empezará cuando, por dificultades para cubrir la demanda, el barril de petróleo alcance un cierto valor. Pero no sólo el petróleo tiene problemas, también el cobre, el fósforo y el litio se ven escasos y se volverán muy caros. De hecho, el alto precio del barril de petróleo actual no ayuda a salir de la crisis porque dificulta que las actividades económicas generen beneficios. La mayoría de los análisis dicen que si se superan los $100 por barril no habrá forma de mantener la economía tal como la conocemos.
La impresión que dará es que la crisis se alargará, que las previsiones no estaban bien hechas como siempre ocurre y, por tanto, no se le prestará más atención de la habitual. Algunas empresas quebrarán pero la gente lo seguirá viendo como algo pasajero propio de una crisis.


4.- El aterrador despertar
No es fácil establecer un hecho que marque un antes y un después, un suceso que estremezca a toda la humanidad y le abra los ojos mostrándoles lo que está por venir. Porque peor que la caída en sí será el momento en el que se sea conciente de que se va a caer y no haya nada que se pueda hacer.
Intentando marcar ese suceso en la sociedad occidental me atrevería a decir que será cuando los aeropuertos cesen la mayor parte de su actividad. La visión de los aviones en tierra convertidos en piezas de museo no dejará a nadie indiferente. Será entonces cuando la humanidad sentirá que da un paso atrás de más de cincuenta años.


5.- El rápido declive
Como todos los cambios que han venido sucediendo en la sociedad de los últimos cien años, no se puede esperar que éste sea lento para que nos podamos adaptar a él. Y la ley de Murphy nos dará los buenos días todas las mañanas.
Existe lo que se llama Reservas Estratégicas que en Europa son de 90 días. Significa que Europa puede vivir sin una gota de petróleo del exterior durante ese tiempo. Cuando los precios del barril suban por encima de $100 se mezclará el que se compra diariamente con el de las reservas por lo que no se percibirá aun el problema real de desabastecimiento. Cuando se agoten esas reservas se volverá a sufrir otro golpe psicológico como el de los aviones en tierra.
Y cada vez las noticias serán más desagradables y ya sólo nos quedará preguntarnos cuando seremos nosotros los que estaremos al otro lado del televisor. Hay países que necesitan de la ayuda exterior para subsistir por se pobres, tener poco territorio y una densidad de población alta. Uno de ellos es Haiti pero cualquier isla densamente poblada correrá la misma suerte. Morirán de hambre en pocos meses porque nadie les va a poder llevar comida pues tendrán más que suficiente preocupándose de cómo moverla dentro de su país.
Este hecho se dará en menor medida en los países con más recursos y en el caso de España veremos como los habitantes de las islas las abandonan para ir al continente.
Otros países igual de dependientes que los anteriores pero que no están en islas producirán grandes mareas humanas. ¿Qué sucederá entonces? O los matamos o nos matarán ellos a nosotros porque nos quitarán lo poco que nos quede.


6.- Fechas
Para terminar de rematar el documento y como si de una apuesta se tratara, pongamos fecha a los acontecimientos descritos. El barril superará los $100 a lo largo de 2010 y las reservas estratégicas se agotarán muy posiblemente antes de finalizar 2011. Hacer un viaje en avión para las navidades de 2010-2011 será difícil y la gente lo dejará pensando que ya se solucionarán las cosas y que ya viajarán en el verano de 2011. Esto sólo acelerará la quiebra de la mayoría de las aerolíneas y en verano de 2011 no habrá vuelos comerciales. Antes de terminar 2011 se habrán producido muertes masivas por hambrunas en lugares que no las habían conocido. 2012 será el peor de los años, porque ya con menos petróleo será más difícil luchar contra las inclemencias del cambio climático y las enfermedades. Se destruirán cosechas, las que haya producirán menos y los medicamentos serán escaso. Al finalizar 2012 la población podría estar por de bajo de los cinco mil millones.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

A ver si entre todos mejoramos las ideas y las llevamos a la práctica