El becario de Dios

Las simulaciones por ordenador son una herramienta que ayudan a comprender cómo funciona un sistema natural y se usan para todo tipo de ciencias e ingenierías. La mayoría de las simulaciones buscan copiar un elemento o pequeño entorno pero también hay simulaciones que buscan copiar un gran número de elementos. Cuanto más reducido es el número de elementos a copiar más precisión se le puede dar.

Copiar el mundo actual, el universo átomo a átomo, hoy en días es impensable pues no existe ordenador que pueda mover esa cantidad de datos. Pero tal vez algún día sea posible, tal vez la computación cuántica proporciones una velocidad de procesamiento hasta ahora impensable y tal vez se pueda llegar a crear una 'cámara de vacío relativista' para acelerar el proceso. Dos relojes van a velocidades diferentes si se encuentran en sistemas energéticos diferentes como un reloj sobre la superficie de Tierra con respecto al reloj de una nave espacial que se mueve a velocidades cercanas a la de la luz. En este caso es el reloj de la nave el que va más lento así que no podemos colocar el ordenador en la nave, hay que realizar un proceso inverso que disminuyera la energía de la habitación donde estuviera el ordenador para poder tener un ordenador más rápido y tal vez esto se pueda hacer con la idea del motor warp [http://www.neoteo.com/motor-warp-mas-cerca-de-lo-que-pensamos].

Otro problema reside en analizar los resultaos de una simulación pues con un conjunto de reglas básicas se puede conseguir que evolucione un mundo altamente complejo y difícil de entender. Pensemos en que somos capaces de crear una simulación de nuestro Universo porque conocemos su Física pero eso no quiere decir que conozcamos como funciona una supernova o un cerebro. Tendríamos una simulación de un universo similar al nuestro pero con una dificultad para analizar similar a las que ahora tenemos si no se puede tener acceso a todo los instantes de tiempo de la simulación y esto podría ser así si el ordenador está en la habitación de vacío relativista. Se crea el ordenador, se inicia con el Big-Bang y no se vuelve a mirar el ordenador hasta 4.000 millones de años después. Y aunque se pudiera acceder a cualquier instante de la simulación porque estuviera memorizado su operario lo tendría muy complicado en su corta vida para analizar toda la cantidad de datos producidos.

En un simulador se pueden crear subprocesos para analizar determinados acontecimientos cómo el número de fotones que pasan por cierta región. Pero esto es un subproceso muy básico y de propósito específico. Se podría crear un subproceso complejo de propósito general que recopile toda clase de información pues también sería capaz de de crear subprocesos de propósito específico. Evidentemente no se tendría mucho control sobre lo qué recoge y que no recoge pero muy seguramente termine recogiendo mucho más de lo que se deseaba recoger. Incluso se analizaría a sí mismo pues él mismo forma parte del sistema que debe analizar.

Con estos subprocesos de propósito general el trabajo sólo consistiría en entender cómo funcionan ellos y cómo almacenan la información para luego crear un intérprete. Es una simulación 'autocognitiva'.

Crear este tipo de subprocesos de propósito general es bastante sencillo, sólo hacen falta una reglas básicas tipo Teoría de la Evolución. Aunque esto puede ser un tanto impreciso y tal vez haga falta reorientar la evolución de alguna forma como dejando caer un meteorito que reinicie el proceso evolutivo, retocando el alimento y el entorno de una determinada especie para que no lo tenga tan fácil y obligar al proceso evolutivo a mejorar los procesos mentales.

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A ver si entre todos mejoramos las ideas y las llevamos a la práctica